¿Sufres abuso o discriminación?
La violencia de género es cualquier acto de violencia, abuso o discriminación que se comete con el propósito de controlar, dañar o oprimir a una persona debido a su género.
Violencia de género en adultos
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La violencia de género es un problema grave y generalizado en todo el mundo. A menudo, las mujeres son las principales víctimas de la violencia de género, pero también pueden ser víctimas los hombres, los niños y las personas no binarias. La violencia de género puede tener consecuencias graves para la salud física y mental de las víctimas y puede tener un impacto duradero en su vida.
Es importante tener en cuenta que la violencia de género es inaceptable y que hay recursos disponibles para las víctimas. Si eres víctima de violencia de género, es importante buscar ayuda y apoyo., el primer paso consiste en explicar la situación que estás viviendo a otras personas, familiares, amistades de confianza pueden ser un buen apoyo, aún en el caso de que hubieras perdido el contacto con ellos, debes intentar retomarlo.
Puede que te sientas culpable e intente justificar a tu agresor, pero recuerda que estas creencias son falsas y te llevan sólo a confundir tus sentimientos, ten la certeza de que tú no estás provocando esta situación en la que vive, bajo ningún concepto no eres culpable de la violencia y que además no existe razón en el mundo que la justifique.
Nunca podrás ser feliz con alguien que te trata mal, sea quien sea, así que, aunque te cueste mucho dar el paso busca el apoyo de tus seres queridos y ponte en manos de personas especializadas lo antes posible.
Tanto en el sector público como en el privado existen toda una serie de recursos con el único objetivo de mejorar los mecanismos de protección, seguridad y asistencia a las personas víctimas de violencia de género, sin distinción de edad o raza.
La violencia de género puede ser difícil de detectar, ya que a menudo ocurre en relaciones íntimas o familiares y puede ser difícil para las víctimas hablar sobre lo que está ocurriendo. Algunas señales que pueden indicar que eres víctima de violencia de género incluyen:
- Si sientes miedo o inseguridad en tu relación.
- Si tu pareja te controla, te humilla o te restringe en tus actividades.
- Si tu pareja te hace daño físico o te amenaza con hacerte daño.
- Si tu pareja te obliga a tener relaciones sexuales o a participar en actividades sexuales que no te sientes cómodo haciendo.
- Si tu pareja te dice cómo vestirte o cómo comportarte.
Es importante tener en cuenta que la violencia de género no es solo física. También puede incluir violencia psicológica, como controlar tus actividades, humillarte o amenazarte. Si sientes que estás siendo víctima de violencia de género, es importante buscar ayuda y apoyo.
Las causas de la violencia de género son complejas y pueden incluir factores sociales, culturales, económicos y personales. Algunas posibles causas incluyen:
- Estereotipos de género: Los estereotipos de género, que son ideas preconcebidas sobre cómo deben comportarse las personas de cada género, pueden promover la violencia de género al perpetuar la desigualdad y el poder desigual entre los géneros.
- Desigualdad de género: La desigualdad de género, que es la discriminación basada en el género, puede contribuir a la violencia de género al perpetuar la opresión y el poder desigual entre los géneros.
- Abuso de poder y control: La violencia de género a menudo se usa como una forma de control y dominación sobre la víctima.
- Trastornos mentales: Algunas personas que cometen actos de violencia de género pueden tener trastornos mentales o problemas de salud mental.
- Consumo de drogas o alcohol: El consumo de drogas o alcohol puede aumentar el riesgo de violencia de género al disminuir la inhibición y aumentar la agresividad.
Es importante tener en cuenta que la violencia de género no es justificable bajo ninguna circunstancia y que es responsabilidad del agresor tomar medidas para cambiar su comportamiento.
Lo primero que debes hacer es consultar con el profesional adecuado, que en estos casos es el psicólogo/a, para que pueda diagnosticarlo y tratarlo adecuadamente. Piensa que pedir ayuda es el primer paso para poder, pedir ayuda no es un síntoma de debilidad sino de valentía. Todos necesitamos ayuda en algún o en muchos momentos de nuestra vida, pedirla es lo más natural que podemos y debemos hacer.