Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

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El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) se caracteriza por pautas de pensamientos irracionales, repetitivos y totalmente involuntarios que producen obsesión en la persona.

El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) se caracteriza por pautas de pensamientos irracionales, repetitivos y totalmente involuntarios que producen obsesión en la persona.

Estas obsesiones causan miedos, angustia y desembocan en ansiedad y estrés en el paciente que se ve abocado a desarrollar comportamientos repetitivos, denominados compulsiones, que llegan a afectar gravemente a la rutina diaria y causan un gran padecimiento emocional.

Ignorar estas obsesiones sólo conlleva un aumento del sufrimiento y la ansiedad, ya que siempre desembocan en la realización de actos compulsivos en la creencia de que éstos ayudarán a aliviar la situación. La realidad es que los actos compulsivos no consiguen detener los pensamientos o miedos, éstos aparecen una y otra vez en un círculo vicioso propio del TOC.

Entre las obsesiones más comunes nos encontramos:

  • La necesidad de tener todas las cosas ordenadas y con patrones de simetría.
  • Terror a la suciedad o a la contaminación.
  • Pensamientos espantosos a cerca de perder el control y hacer daño a los demás o a uno mismo.
  • Pensamientos no deseados sobre violencia, sexualidad, religión…
  • Miedo y nula tolerancia a la incertidumbre.

Cada tipo de obsesión llevará a la persona que la padece a:

  • Estrés y ansiedad cuando las cosas no se encuentran en el orden y/o simetría deseada.
  • Miedo a ser tocado o a tocar para no ser ensuciado o contaminado por otros.
  • Miedo a provocar un daño estando entre una multitud de personas, o a no actuar correctamente en público.
  • Pensamientos desagradables a cerca de pegar a alguien, o sobre prácticas sexuales, etc.
  • Dudas de si se ha hecho algo como cerrar un cajón, la puerta, el coche, o apagar la luz, la calefacción, etc.

Los comportamientos repetitivos que desencadenan este tipo de obsesiones, en la creencia de que reducirán el estrés y la ansiedad pueden ser, entre otros:

  • Limpieza excesiva.
  • Revisión, recuento, comprobación del orden.
  • No desviarse nunca de rutinas que se convierten en estrictas.
  • Lavarse manos hasta dañar la piel.
  • Comprobar repetidamente puertas, o luces, o calefacción o cocina.
  • Repetir compulsivamente una palabra o frase.

Aunque la procedencia genética del TOC está demostrada, también es producido por factores ambientales, como la transmisión dentro de la familia de comportamientos compulsivos o manías, que hace que dentro de una misma familia sea muy frecuente encontrar a varios que padezcan un TOC.

Suelen aparecer en la adolescencia o desde la juventud, aunque también puede darse en la infancia.

Lo primero que debes hacer es consultar con el profesional adecuado, que en estos casos es el psicólogo/a, para que pueda diagnosticarlo y tratarlo adecuadamente. Piensa que pedir ayuda es el primer paso para poder, pedir ayuda no es un síntoma de debilidad sino de valentía. Todos necesitamos ayuda en algún o en muchos momentos de nuestra vida, pedirla es lo más natural que podemos y debemos hacer.

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